Sean siempre espontáneos,
tiernos, amables y un poco locos…
Nunca escondan
su conmoción
y nunca te avergüences
si baja alguna lágrima,
porque de cínicos y arrogantes
el mundo está lleno

J.P. Sánchez

...He aquí un heredero. Desde la Mancha hasta nuestros tiempos. Por la insurrección de los sueños; la resurrección del asombro; la vigencia de la locura y el imperio de esas fantasías que aún nos quedan...

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