La Decisión de Sophie…

Por Yamil Haddad

Terrible esa película. Una madre de dos, torturada por un Nazi, tiene que elegir a cuál de sus hijos manda a un campo de trabajo forzado, donde teóricamente puede sobrevivir, y cual va a la cámara de gas.

No voy a mentir… Nunca he podido verla. Debe ser que la Meryl Streep me asusta, porque es tan buena actriz, que le voy a creer todo y la verdad es que la situación es tan angustiante, que me pongo en los zapatos del personaje y ni siquiera me da el cuero para verla.

Mucho menos dramático es lo que va a pasar el próximo domingo, pero me pasa lo mismo. Es una película que no quiero ver, y para más mala cueva, me tinca que va a terminar igual.

En la peli la Sophie toma una decisión racional. Piensa que si manda al niño, que tiene más años y es más fuerte, al campo de trabajo, va a tener mejores posibilidades de sobrevivir. En cambio si manda a la niña, que es muy chiquita, al campo de trabajo, y al niño a la cámara de gas, lo más seguro es que ambos morirán.

A mi, en lo personal, me hubiera encantado que la niña fuera más fuerte, que fuera ella la que se salvara. Pero entiendo a Sophie, y seguramente yo hubiera tomado la misma decisión en esa circunstancia. Que bien que en Chile pase lo que pase el domingo nadie va a morir.

En la peli uno no le puede decir nada a la Sophie, porque no era su culpa que la niña fuera tan chica, que le faltara experiencia, pero aquí en Chile uno si podría reclamarle al FA. Uno podría haberles exigido un poco más de rigor para elegir a la candidata. Yo creo que ni ellos pensaban que tenían posibilidades y por eso ni programa le traen. Mal por ellos, podrían habernos facilitado mucho las cosas con una mejor postulante y con un programa en serio.

Porque me pasa que Oliva representa el tiempo nuevo, lo que uno quiere para Chile, pero no la ve capaz de sobrevivir a la complejidad del segundo cargo electo más importante de Chile, y votar por Claudio sólo porque está mejor preparado, no me parece suficiente.

Me ha costado decidir mi voto. Aún así, yo soy socialista, Siempre seré de izquierda y nunca conservador. Y eso me resuelve todos los problemas de conciencia.

Yo no voy a votar con la UDI por un señor que no cree en el aborto libre, que cree que el matrimonio es entre un hombre y una mujer y el resto perversión, y que la seguridad pública va a tener éxito con más maneras de reprimir a los pobres. Y menos si toda su experiencia no sirve de nada, porque al cargo que postula, si bien es territorial, no tiene aún funciones, ni atribuciones, ni presupuesto, por lo que esta elección es mucho más política que territorial, y ahí, en lo político, yo no me pierdo.

Me sacan el argumento que la palabra empeñada. Pero yo creo que nuestro compromiso lo cumplimos con largueza en la primera vuelta. Ese día se terminaron todos los pactos porque el pueblo nos mandó una señal contundente. Si algunos de nuestros más connotados no lo oyeron, ruego a los que están cerca de ellos que le cambien las pilas al audífono.

Soy socialista, no me voy a amarrar al mástil del pasado, no me voy a separar del pueblo, aunque los dirigentes circunstanciales del socialismo quieran “fusionarnos” con los liberales -Yo soy socialista, no soy liberal-, aunque pongan de jefe de campaña a un xenófobo, yo no dejo de ser socialista, de creer en la patria grande que tenemos en la bandera, de creer que la vida se hace en sociedad y no individualmente como creen los liberales.

Voy a votar por Oliva el domingo. No creo que sea la mejor candidata, pero lo que representa es el deseo de los pobres de cambiar esta mierda, y eso con Orrego no se logra, y yo, que no ambiciono ninguna peguita, no me pierdo. Aunque la cabra nos odie, aunque hable puras wevadas y nos enjuicie por los 30 años, no se llega tarde a la cita con la historia. Ojalá que triunfe, y el FA le suministre el apoyo que le falta. Por lo pronto que cuente con mi voto, que ahí es donde tenemos que estar los socialistas.

Socialistas Salud.

J.P. Sánchez

...He aquí un heredero. Desde la Mancha hasta nuestros tiempos. Por la insurrección de los sueños; la resurrección del asombro; la vigencia de la locura y el imperio de esas fantasías que aún nos quedan...

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